El gobierno nacional implementó un recorte en la entrega de medicamentos gratuitos a jubilados y pensionados, restringiendo el beneficio a quienes perciban ingresos menores a $388.500 mensuales. Además, los beneficiarios deberán completar un trámite de inscripción para acceder a esta cobertura.
Desde el Programa de Atención Médica Integral (PAMI), el titular Esteban Leguízamo aseguró que la medida busca priorizar a quienes realmente lo necesiten. "Seguiremos garantizando el acceso total a medicamentos mediante el subsidio social para aquellos que no puedan pagarlos", expresó en un comunicado.
El trámite para solicitar el subsidio social es obligatorio y puede iniciarse en la página web de PAMI, con la posterior presentación en las agencias correspondientes. Sin embargo, el proceso puede extenderse hasta un mes, lo que genera preocupación entre los afiliados que dependen de estos medicamentos para tratamientos continuos.
Mientras tanto, los descuentos del 50%, 60% y 80% en medicamentos seguirán vigentes sin modificaciones, aunque los productos de venta libre continúan excluidos de cualquier tipo de bonificación.
La medida ha suscitado críticas por parte de jubilados y organizaciones defensoras de sus derechos, quienes advierten sobre el impacto negativo de estas restricciones en un sector vulnerable. A pesar de los argumentos del gobierno sobre focalizar los recursos, los detractores señalan que el proceso de inscripción podría excluir temporalmente a muchos beneficiarios que no tienen acceso o conocimiento para realizar el trámite digital.
Con una inflación creciente y el costo de vida en aumento, esta decisión plantea interrogantes sobre el alcance de la cobertura y el nivel de acceso efectivo a la salud para miles de jubilados en el país.
