Este jueves, la gestión del intendente Guillermo Montenegro presentó al Concejo Deliberante de Mar del Plata el pliego de licitación para concesionar el Estadio José María Minella y el Polideportivo Islas Malvinas por un período de 30 años, con la opción de prórroga por 10 años adicionales. Este proceso, que será tanto a nivel nacional como internacional, busca impulsar una renovación integral de los dos emblemáticos espacios deportivos de la ciudad.
Uno de los aspectos centrales del pliego es que se otorgarán más puntos a aquellos oferentes que firmen un convenio con la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), en pos de desarrollar actividades relacionadas con el fútbol y potenciar el uso del estadio. El canon anual establecido para la concesión será de $120 millones, aunque el pago de este monto comenzará a regir tres años después de la firma del contrato.
Además de la vinculación con la AFA, el Ejecutivo local subraya la importancia de las obras propuestas en los espacios licitados. Se priorizarán proyectos de refacción y construcción que tengan un impacto significativo en el mejoramiento de las instalaciones. Según el pliego, se tendrá en cuenta "la magnitud y el impacto de las obras nuevas y de las refacciones que se propongan en el espacio licitado".
La evaluación de las ofertas no solo se basará en el aspecto económico, sino también en la calidad del plan de inversión y su viabilidad. El municipio analizará detenidamente las etapas y tiempos previstos para la ejecución de las obras, así como el respeto por el entorno arquitectónico, urbanístico, paisajístico y de accesibilidad. "Será de importancia el respeto de las cualidades del entorno de pertenencia, evaluándose el grado de integración entre la obra propuesta y el sector", destaca el documento oficial.
Con este proyecto, la administración de Montenegro apunta a revitalizar dos de los escenarios deportivos más importantes de Mar del Plata, buscando que, a través de esta concesión, se garantice su modernización y mantenimiento a largo plazo.